LA MIRADA INOCENTE,

Joaquín Benito de Lucas

 

 

 

Distinguido con el X Premio Ciudad de Córdoba “Ricardo Molina” del año 2002, este libro de Joaquín Benito de Lucas es un ejemplo de ese tipo de poesía sencilla y clara –que no simple–, que elabora una y otra vez a los temas de siempre, expresados con una inequívoca precisión poética.

         Los poemas –casi si todos ellos con una mínima anécdota narrativa– expresan el regreso del autor al espacio rural de su infancia donde, a pesar de las carencias, fue feliz. Y en cada mirada retrospectiva rezuma el poema una contenida emoción, expresada con versos tan claros como la inocente mirada que proyecta su autor.

         Valoro la fluida construcción de los poemas por encima de algunos temas recurrentemente tratados (la enfermedad, el hecho religioso durante la infancia, la intrahistoria de algunos  hombres y mujeres que acaban en el olvido…). El ritmo, la estructura temática del poemario y la perfección métrica –casi siempre heptasílabos y endecasílabos– hacen de este “libro clásico” una lectura agradable para aquellos que gusten de versos alejados de ciertas modernidades temáticas y expresivas.

 

SIN TON NI SON

 

Yo sé que es una cosa que no tiene sentido

y si lo tiene no me importa, porque

cuántas cosas hacemos sin ton ni son. En ésta

debe de haber algún significado.

 

Cuando llego, si he estado mucho tiempo

sin ir, miro las cosas que conozco

como si nunca las hubiera visto

y salta mi niñez en las plazuelas.

 

Cruzo las calles como quien saluda,

me agarro a las tabernas, tomo vino

del tiempo, hablo con unos y con otros,

río cuando me cuentan algún chiste sin gracia…

y me pongo a llorar sin ton ni son.