ESCRIBIR CUENTO. 

MANUAL PARA CUENTISTAS,

VV. AA.

 

 

 

 

Con la pretensión de convertirse en un referente para amantes de este género, la editorial Páginas de Espuma publicó hace un par de años este completísimo manual que trata todas las cuestiones del proceso creativo de un relato corto. Como es imposible dar cuenta exacta de lo que en él se explica, baste decir que en cada capítulo se aborda un aspecto esencial a cargo de escritores y estudiosos de este género, muchos de ellos vinculados a la Escuela de Escritores de Madrid.

         Es reseñable las abundantes referencias a cuentos extraordinarios (“Cartas de mamá”, de Julio Cortázar; “El rastro de tu sangre en la nieve”, de G. García Márquez; “El diablo de la botella”, de R. L. Stevenson; “Abril es el mes más cruel”, de Guillermo Cabrera Infante; “Un hombre bueno es difícil de encontrar”, de Flannery O’Connor;  “Un par de ojos azules”,  de Thomas Hardy), que sirven de modelo para comprender aspectos referidos al uso del tiempo y del espacio, del argumento, del difícil dominio de los diálogos, de la conveniencia de acertar en el cierre de la acción, del ritmo que modula el texto, y de tantos aspectos que hacen de este libro una referencia no sólo para advenedizos interesados en aprender, sino para aquellos escritores avezados que se enfrentan al folio con no pocos titubeos.

         He aquí alguna de las citas que anoto al compás de la lectura:

“Idear una historia es imaginar a un personaje atravesado por un deseo” (Ángel Zapata);

“Si un relato cuenta un cambio, un relato cuenta un conflicto. Si no hay conflicto ni cambio no estamos escribiendo un relato; todo lo más, es una simple anécdota, por muy bien escrita que esté” (Isabel Calvo);

 “Todo lo que no sea información relevante para el argumento o la trama debe evitarse en la medida de los posible” (Alejandro Marcos);

 “En vez de explicar al lector la información que contiene el relato, siempre es mejor preguntarnos si no será posible mostrarlo con una imagen, un objeto, una acción, un detalle o algún elemento sorprendente” (María Tena);

“La existencia de una meta, no sólo física o geográfica, sino de cualquier tipo (un trabajo mejor, terminar un libro o comprar el ansiado vestido) posiciona firmemente al lector en una dirección, ayudando a fomentar sus expectativas” (Ignacio Ferrando);

“A los lectores no nos gusta que nos dejen las historias a medias, sin saber qué va a pasar con los personajes o a mitad de una escena. También nos gustan los desenlaces originales, y mejor todavía si son sorprendentes. Es emocionante llegar al final de un relato y que el autor haya encontrado un último giro que nos deje con la boca abierta” (Paula Lapido);

“Mientras en la vida real existen las verdades y las mentiras, en los relatos impera una única ley: la verosimilitud” (Enrique Páez);

“En toda actividad creativa se presenta esta fase de espera entre la experiencia vivida y la escritura del poema” (Eduardo García);

“Uno escribe a base de (sic) ser minero de sí mismo” (José Luis Sampedro).

 

 

 

Editorial: Páginas de Espuma

Título: Escribir cuento. Manual para cuentistas

Autores: VV. AA.

Primera edición: 2020